El pasado sábado 1 de junio, el campus Valparaíso del Instituto acogió a la organización “Mujeres con Energía Positiva”, agrupación de mujeres viviendo con VIH que desarrollaron el taller “Tejiendo Memorias Colectivas”, el cual buscó abrir un espacio seguro para compartir sus vivencias por medio de la tradicional práctica del tejido en arpillera, guiado por la artista Leyla Muñoz.

Esta agrupación reúne a mujeres y disidencias sexo-genéricas que viven con VIH, mayormente de la V región, quienes se autoconvocan en torno al apoyo mutuo y la generación de vínculos para promover la educación sexual integrar e incidir en el desarrollo de políticas públicas destinadas a esta comunidad.
La fundadora de la organización, Susana Unzaga, relató la instancia que brindó la oportunidad de “habitar un momento en la realidad de las mujeres y disidencias sexuales con VIH, así como con sus cariños cercanos. Es lo que se vivió el sábado 1 de junio en la sede del Instituto Profesional ARCOS Valparaíso. En una jornada de profunda reflexión en torno a una arpillera, agujas, lanas y sentimientos, se compartieron experiencias sobre los diagnósticos, los miedos, las esperanzas, los tratamientos médicos y el estigma social”.

“Nos acompañaron historias de resiliencia para bordar un tapiz, que es símbolo de resistencia, esperanza y solidaridad entre las personas que viven con VIH y que espera pueda sensibilizar a nuestra sociedad sobre la importancia de la educación con una mirada inclusiva. Cada puntada una risa, cada puntada una lágrima, cada puntada una palabra de aliento, un momento para respirar la vida en su fragilidad y fortaleza. Es así como Mujeres con Energía Positiva de Viña del Mar vivenciaron su primer taller Tejiendo Memorias Colectivas”, añadió la fundadora de la agrupación y activista VIH.
Desde I.P. ARCOS, la jefa de Vinculación con el Medio regional, Loreto Aravena, también comentó sobre la experiencia. “Nos complace saber que el Instituto es mirado como un espacio seguro en que puedan encontrarse, compartir y crear, reafirmando con ello, nuestro compromiso con el territorio y todas las personas que lo habitan”.


La actividad en la que participaron mujeres, diversidades y sus familias finalizó con la creación de una obra textil colectiva con telas recicladas, la cual será utilizada como lienzo durante marchas, ferias y actividades, con el fin de seguir aportando a la resignificación de las violencias que vive esta comunidad, además de desmitificar algunas ideas y conceptos que aún siguen presentes en la sociedad.