Este miércoles 15 de mayo, a las 17:00 horas, se presenta el libro que es una cuidada recopilación de imágenes sobre el universo visual de la fotógrafa chilena Ana María Ziebold (1946).
Su presentación será en la Sala Ercilla de la Biblioteca Nacional, en avenida Libertador Bernardo O'Higgins 651 y estará a cargo de la docente de la Escuela de Fotografía del Instituto Rita Ferrer, Jorge Sacaan, Sandra Gaete y Soledad Abarca, directora de la Biblioteca
La obra es un testimonio de la mirada de Ana María Ziebold con la que capturó desde niños a ancianos o el paisaje rural, con dominio del claroscuro, por lo que su legado perdura en las imágenes que capturó entre las décadas de 1980 y 2000.
Rita Ferrer, docente de ARCOS, adelanta la obra indicando que observa en esta publicación “que reúne por primera vez parte de la notable producción fotográfica de Ana María Ziebold, un cuerpo de imágenes entreveradas por los géneros clásicos de la fotografía desplazados desde la tradición de la pintura, por amor a la investigación, edición y difusión de Sandra Gaete: diseñadora gráfica, editora y gestora cultural, quien invita a Ana María, su madre, a compartir el trabajo de recopilación, organización archivística y concepción editorial cruzado por intensas y variopintas conversaciones, algunas marcadas por pérdidas, duelos y conjuras de sanación”.
Cabe destacar que el archivo fue donado a la Biblioteca Nacional y pasó a formar el segundo archivo de una fotógrafa que antes fue el archivo de Inés Paulino, cuya selección se expone en Palacio Pereira.
“Casi todos los géneros de la tradición fotográfica abordados por Ana María Ziebold, por primera vez, los vemos desplegados en esta publicación -ya sean estudios de luces y sombras, opciones y experimentación de películas en la toma, encuadres o esquiagrafías- en paisajes, retratos, infancia, familia, interiores domésticos, oficios, entornos campesinos, mineros, marinas, espacios peculiares, caminos rurales, algunas fotografías urbanas, que retratan un tiempo finisecular situado. Fotografías visualizadas como pinturas de luz o, en su extremo, tinta china que no proyecta sombras, sino esquiagrafías, como conceptualizó su invento Henry Fox Talbot en The pencil of Nature”, ahonda Ferrer, periodista especializada en crítica y teoría de la fotografía.
“La concepción de su trabajo artístico, que se sueña como un camino, o ensueña como agudamente nombra Ana María Ziebold a una fotografía rural brumosa de su autoría que comparece en esta publicación, persigue a través de su oficio fotográfico lo maravilloso, lo fantástico junto a lo gravoso. En su camino podemos desentrañar una estética que se plantea como maneras de soñar despierta y, fuera de bambalinas, formas de existencia y observación de una mujer casada, con hijos, que a los treinta y cuatro años tuvo un encuentro deslumbrante con la fotografía y que, a partir de ese giro, la ilumina por un sendero antes insospechado”, cierra en su análisis Rita Ferrer, quien invita a asistir al lanzamiento de este libro en la Biblioteca Nacional.