Se trata de Majo Puga, ilustrador trans no binario y jefe de carrera de Ilustración de la sede de Viña del Mar de ARCOS que lanzó su libro “Ingentrificables”.
Por Jocelyn Jara
El pasado 7 de octubre en la Librería del Fondo de Cultura Económica Manuel Rojas se lanzó el libro “Ingentrificables” de Majo Puga y Juan Yolin, con la presentación de Noir Yaguara y Cristóbal Gaete.
El jefe de carrera de Ilustración de la sede de Viña del Mar de ARCOS se ha destacado por participar como ilustrador en diversas libros y publicaciones, además de exposiciones tanto colectivas como individuales, residencias artísticas, laboratorios creativos y talleres sobre ilustración y narrativa gráfica.
Además, ha sido reconocido como parte del catálogo Iberoamericano de ilustración 2022 de la Fundación SM y Feria Internacional del Libro de Guadalajara, y es parte de la exposición y selección del premio a la Ilustración Latinoamericana de la Universidad de Palermo 2021 y autor del libro PODER TRANS, que recopila la historieta latinoamericana trans de la Editorial Municipal de Rosario, Argentina.
Y por otro lado, es socio fundador del proyecto La Kioska, dispositivo artístico y punto de distribución de suplementos, diarios, libros, fanzines y arte gráfico local, de Playa Ancha, Valparaíso y miembro de la Cooperativa de Trabajo Enjambre, colectiva dedicada a la educación artística.
La novela gráfica publicada bajo Ediciones Libros del Cardo narra el proceso de gentrificación del Barrio Puerto de Valparaíso a través de ilustraciones estéticamente oscuras. “Una decisión importante fue ilustrar sobre negro, representar la noche y la oscuridad humana”, comenta el docente.
“Lejos de la imagen de un Valparaíso postal y vespertino, las narraciones de este proyecto apuntan a representar la vida de una ciudad que durante su noche aglomera a distintas comunidades que desde los cerros vienen a converger al plan. De ahí el título y su relación con la gentrificación, proceso mediante el cual la población original de un sector o barrio céntrico y popular, es progresivamente desplazada por otra de un nivel adquisitivo mayor”, explica el autor.
“Sin embargo, hay barrios y comunidades que se han resistido a este proceso y no por una inclinación necesariamente política sino por su propia naturaleza, incapaz de ser comprendida en un proceso de modernización de la ciudad, grupos humanos que portan una cultura y sensibilidad con lógica propia”, añade el ilustrador.
Comenta que la idea de crear esta novela nació en 2018 cuando fue seleccionado en una convocatoria de historieta organizada por la Editorial Municipal de Rosario, Argentina, publicando el libro Poder Trans de la misma editorial. “Este hecho me impulsó a seguir indagando en este género y sobre todo desde la autobiografía, el territorio y mi ciudad”, comenta.
“Desde ahí en conversaciones con Juan, con quien ya tenía un vínculo de amistad y trabajo desde nuestras disciplinas, surge la idea de la novela. Específicamente recuerdo una tarde en Plaza Echaurren, cuando Juan dice: este lugar es “ingentrificable”, haciendo mención a la gentrificación y a los diversos intentos por cambiar o domesticar este barrio, que ya bien conocíamos, pues ambos vivimos en el puerto”, continúa.
“Es entonces cuando nace la idea de crear un ecosistema de historietas que hablen del barrio puerto contemporáneo, con todo lo que significa; el abandono, las ruinas, la pobreza, la oscuridad, la magia, las personas, la muerte y la vida. Un relato alejado de la imagen postal o romántica de Valparaíso y que da cuenta de la memoria emocional y social de nuestro barrio”, recuerda.
De esta manera, es que las historietas que componen el libro hablan sobre estigma, abandono, sueños, miedos, memoria, “señales transversales en las historias humanas, pero que ocurren en un lugar con identidad propia, lo que puede acercar o interesar especialmente a sus habitantes y eso creo es poderoso, pues nos encuentra en un relato colectivo y en el resguardo de la memoria del lugar y de las personas que viven en él”, señala Majo Puga.
“Una de las historietas, Mariela, narra el devenir de una de las tantas representantes de la llamada “cultura churri”, es decir, personas que viven y se desviven en las inmediaciones de Plaza Echaurren. Barrio Puerto ha sido por excelencia uno de los espacios que se resiste, por su impronta y estigmatización, al progreso impuesto a la ciudad. Por lo tanto, Mariela es un personaje que ayuda a internalizar no sólo una condición humana asociada a la pobreza y el consumo de drogas, sino del barrio y su conjunto arquitectónico”, comenta.
A más de un mes desde el lanzamiento del libro, el jefe de carrera de Ilustración comenta que “asistió mucha gente, colegas, estudiantes, artistas, vecinos y vecinas. Posteriormente realizamos una tertulia y lectura poética en el bar Liberty de Valparaíso en barrio puerto, para homenajear a la poeta Ximena Rivera en la cual se inspira una de las historietas del libro. En la lectura participaron los poetas Diego Armijo, Carlos Henrickson, Fernanda Meza y Daniel Tapia, además se presentó Taira Pizarro cantautora porteña y Jocelyn Torreón artista y cantante”.
Además, comenta que “hemos recibido una gran acogida en Valparaíso y sobre todo en el barrio, vecinos y vecinas”. El libro se encuentra disponible para toda la comunidad en la biblioteca popular Jorge Farías en Plaza Echaurren de Valparaíso.
Por estos días, el académico se encuentra trabajando en su nueva novela gráfica que llevará por título “Todo lo que no soy”, y que tendrá como foco relatos autobiográficos sobre género y diversidad trans.